El día 5 de febrero de 2019 empezará el año del Cerdo[1] de Tierra Yin[2]. Es el fin de un ciclo, el fin de la rotación de los 12 signos.
En la cultura china, el animal de cada persona depende del año en el que se ha nacido. Teniendo en cuenta que éste comienza a finales de enero o principios de febrero. Las características de ese animal serán las que determinarán la personalidad, la suerte, las desgracias o, incluso, el amor ideal de cualquiera de nosotros.
Para los chinos 2019 será un año alegre, conciliador, en el que se buscará el bien común. Tendremos tendencia a querer divertirnos y a ser positivos.
El consejo chino sería: analizar bien las cosas y ser realistas a pesar del bienestar del que disfrutaremos.
¿Cómo se prevé el desarrollo económico para 2019?
Según el último informe publicado por el Banco Mundial “Global Economics Prospects”, se prevé que después de registrar 3,1% tanto en 2017 como en 2018, el crecimiento de la economía mundial se desacelere en los próximos dos años conforme se disipe el exceso de capacidad a nivel global, los principales bancos centrales normalicen sus políticas y madure la recuperación de los exportadores de productos básicos.
A medida que el crecimiento del comercio internacional se modere paulatinamente, se espera que el crecimiento en los mercados emergentes y las economías en desarrollo se estabilice. China prevé un crecimiento económico del 6,3% para el año 2019, dato inferior al de años anteriores.
¿Cómo nos afecta el año nuevo chino?
En estas fechas se suceden diversas tradiciones en el país oriental. Las fábricas chinas intentan finalizar el stock de sus almacenes, cuadran sus cuentas y envían a los trabajadores a sus hogares. Por eso, es importante que se tenga en cuenta que desde finales de enero y hasta la segunda quincena de febrero la actividad laboral en China será muy baja ya que, se considera fiesta nacional desde el 4 hasta el 10 de febrero.
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[1] Según cuenta una leyenda, Buddha mandó llamar ante su presencia a todos los animales de la Tierra. Sin embargo, únicamente doce aparecieron ante él.
Otra leyenda china dice que fue el Rey de Jade quien organizó una carrera para determinar cuáles eran los animales más rápidos. Los primeros doce que lograron cruzar un río señalado fueron los escogidos. Representando así a las doce ramas terrestres en las que está dividido el orden cíclico del calendario lunar.
[2] Según los antiguos filósofos chinos, los cinco elementos fundamentales del Universo que se combinan con los doce animales e influyen en su personalidad son: el metal, la madera, el agua, el fuego y la tierra. Cada elemento reina dos años, uno bajo el signo del Yang y otro bajo el signo del Yin. Estableciéndose así un equilibrio perfecto.